Dentro de un baúl antiguo guardo pequeños cuadraditos de colores. Son papelitos recortados con tijeras chiquitas y con poco filo. Cada papelito está pintado con fibrones de colores que dejan escapar las vetas que la pintura produce. Miden entre cinco y siete centímetros. Son de distinto tamaño y estan pintados de los dos lados.
Todos los días saco uno sin mirar. El color que sale pinta el color de mi día.
Todos los días saco uno sin mirar. El color que sale pinta el color de mi día.
6 comentarios:
Me encantó...lo voy a poneren práctica besis
los objetos reflejan el color que no pueden absorber. Del color que los vemos, es justamente el que no tienen en su interior, el color que rechazan.
Preguntita: entonces ¿de que colores son tus días?
gabriel (de la fábrica de colores que no son de ciudad jardín...) más besos...
SEGURA, NO ESPIAS? JAJAJAJ BESITOS
MAMUSHKA
esto me hizo acordar a la semana "rosa" en mi adolescencia, en donde vos abrías TU agenda al azar y en esa semana del año iba a ser tu semana de suerte, tu semana "rosa" como si el rosa fuera de suerte...rosa de amor de adolescencia????
quizás podes hacer al reves, cuando finalice tu dia pintas el papelito según como lo vivistes, quizas de la otra forma te condicione tu día y no puedas vivirlo con lo misterioso y lindo que tiene no saber que va a pasar despues que te levantás.
te extañooooooo!!!!!MARITA
me gusta lo relativizado que fue mi secreto. Es genial que el papelito de color sea el papelito de mis carencias como dice gabriel, o que por momentos espíe el color sólo para mentirme un rato cómo consulta Mamushka o la propuesta de sacar pepelitos blancos para ir pintándolos según el día y los misterios que éste regala como propone Marita. Gracias, otras visiones sobre mismos secretos.
Dale Carlita, te presto mi baúl cuando quieras.
Gracias a todos por espirar, besos
Ah! Había olvidado por completo lo que me contás Mari de mi "semana rosa", ahora como lejano escucho una brisa de recuerdo al respecto. Y pensé dos cosas. Por un lado que tipa jodida que era que sentenciaba a una semana la suerte de un año, como si el azar lo determinara y como si fuera un regalmento suerteril azaroso... me asusta un poco, je.
Luego pensé que jamás me gustó demasiado el rosa, hoy tampoco... cómo llegue a relacionar el rosa con la suerte? uf... me hiciste pensar mucho... es más, dejo de escribir para llamar a mi psicóloga... jajajjaja
besos
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